Peligro: darse de baja del seguro no es tan fácil

    La ley de los contratos de seguros es una norma desconocida por muchos. Durante el tiempo que han durado las vacas gordas los clientes podíamos cambiar de seguros de forma más fácil gracias a que las compañías aseguradoras hacían la vista gorda, pero la crisis está cambiando esta situación, por eso hay que tener mucho cuidado.

    La ley de los contratos de seguros no permite que podamos darnos de baja sin previo aviso. En su artículo número 22 citaba que las partes pueden oponerse a la prórroga del contrato mediante una notificación escrita a la otra parte, efectuada con un plazo de dos meses de anticipación a la conclusión del período del seguro en curso. Es decir, deberemos de avisar con dos meses de antelación que no deseamos seguir con la compañía de seguro.

    La ley de contratos de seguros supone que deberemos adaptarnos a esta situación porque si no nos pueden reclamar judicialmente el cobro de la prima, llegando incluso al embargo. Por eso, no podemos ya cancelar nuestra antigua póliza con el antiguo método: llamar al banco y decir que no acepten ningún cobro de nuestra antigua aseguradora. Ahora, habrá que avisar a nuestra compañía si no queremos vernos en problemas. En tiempos de crisis, las empresas no quieren perder ni un euro aunque eso suponga una mala imagen.